Nada y todo nos pertenece
somos viajeros del tiempo
contadores de suspiros
abrazos tiernos en cadena
Nada nos pertenece
ni los hijos, ni la mesa del salón
ni las flores del jardín
solo ese beso que me diste
Nada y todo nos pertenece
toda esa dicha de amor
que un día me regalaste
lo guardo en mi rincón del cielo
en las imágenes de mi alma
en los sueños eternos
para el día que deje
mis manos, mis ojos, mis pies
y mi sonrisa será una rosa roja
un regalo para ti.
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