Sorteaba
las hojas del otoño
una mañana del lunes
de octubre calurosa
recibiéndote...
como bienvenida
de un nuevo día
sorprendida con el tic tac
de un aviso singular
de un amigo, de un poeta...
En la ciudad
entre los edificios,
entre los coches, las aceras
un verde monte
se asoma para respirar
y le pregunto al tiempo
si desde las nubes grises
de este calor
vas a mojarnos
las velas
con la lluvia de tu canción
"No importa" me contesta
si las gotas cuentan tus años
ahí va mi ¡regalo¡
un sonrisa compañera
que te acune, que te abrace
para hoy
para mañana
para siempre.
¡¡¡FELICIDADES¡¡¡
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