Abro mis ojos a los azules, a esos ojos suyos
Alguien que entre flor y flor del espacio nuevo, avanza
Atiende mi llamada, escucha mi señal, me acoge y retoma
Dando comienzo a cierta esperanza demasiadas veces herida
Instantes o tiempo de vida para respirar de nuevo
Para sentir el calor de la mañana, de nuevas mañanas
Mirar la hierba, pasear con voces amigas, sentirte
Y mientras… surge la sonrisa, otra vez, de nuevo
Ahora noto sus miradas perdidas, a veces, indefensas
Que caminan lentas sobre mí, sobre mi humilde persona
Buscando un interés, un mundo o una pregunta
Hijos de cielo caminantes de la incesante tormenta
Dulces aves o pájaros de ala quebrada
De sabor amargo, dulce o frío, verde y menta
Incomprendidos y acogidos entre las suaves olas de la playa
Seres de horizonte incierto, de lágrimas, de fragilidad
Seres que retoman senderos, de alegrías, de paz, de encuentros y
Una nueva luz alumbra el desaliento, la confianza, mi fe…
No hay comentarios:
Publicar un comentario